©Antonia Cerrato Martín-Romo. Con la tecnología de Blogger.

jueves, 21 de junio de 2012

Cuadro realizado por Mari Cruz Amaya sobre un poema para el homenaje a Raquel Matesanz



A RAQUEL MATESANZ
Te marchas, así como la golondrina,
con la esperanza de primaveras entre las alas,
así, llena del sol, igual que una adelfa
del glorioso  Guadiana.

Cuando sea otoño en Badajoz, otoño
bajo el Puente de Palmas
te habrás ido río abajo
música de mujer, canción de agua.

Vestida de ojos sinceros
 con la fuerza de la encina y la palabra
te irás, con esa alegría misionera
tan inmensa, tan invencible,  tan de gata.

Te marchas, Raquel, así como la tarde
pacense,  que busca el mar,
así, sonriendo a la vida, como llegaste,
con el corazón de par en par.

Cuando sea otoño en Badajoz, otoño
en los Jardines de la Galera
te habrás ido, Alcazaba arriba
pero de nuestra amistad
siempre prisionera.

 Y aquí se quedarán tus versos
piedra angular de esta historia
que tejen jueves a jueves
los poetas del Victoria.



Antonia Cerrato Martín-Romo
Badajoz, 13 de Junio de 2012
 Decoración floral: Mari Cruz amaya

lunes, 18 de junio de 2012

Apenas si tiene hojas y no deja de ofrecerme cada día una flor nueva. Incansable, sin envidias, sin reservas,en soledad, generosa, la vida se nos regala en todo su esplendor, en una simple maceta a la que solo hay que echarle agua... y una mirada de admiración y gratitud.

miércoles, 13 de junio de 2012

Publicación en el blog de matemáticasypoesía

http://www.matematicasypoesia.com.es/Colaboradores/Antonia-Cerrato.htm

jueves, 7 de junio de 2012


NI BUCÉFALO NI BABIECA

Caballo viejo de madera
mito antiguo
de traición y argucias,
 
asentado en medio de la noche
te alimentas, ídolo maldito,
de rencores soterrados

¿quién desgarró tu vientre
y como sierpes tus intestinos
anegaron el palacio?
La envidia, la Envidia, la ENVIDIA.

Caballo de medio pelo
hinchados los belfos de veneno y falacias
qué feliz te las prometes
cantando veleidades a orcos travestidos

Impotente y cobarde podenco
jamás tendrás unas justas
donde probar tu ambición,
acaso un ridículo estafermo
dé pábulo a tus caprichos
pero ¿a dó un caballero?
Nunca lo llevaste tú.

Antonia Cerrato Martín-Romo
3 de junio de 2012